Las niñas y jóvenes asturianas presentan mejores resultados educativos que sus compañeros, en promedio. Estos mejores resultados se manifiestan en tasas de idoneidad, de promoción de curso, de graduación, de duración media de los estudios, etc. Sin embargo, en la transición al empleo de las graduadas en Ciclos Formativos de Formación Profesional, por ejemplo, muy pronto se detectan ya las principales desigualdades de género que caracterizan al ámbito laboral: brecha de género en las retribuciones y diferencias en las jornadas laborales (más empleo a tiempo parcial para las mujeres).

A continuación se facilita una nota sobre este nuevo apartado.