Tasas de actividad
Tasas de actividad
La población activa es aquella que tiene un empleo o que está en situación de desempleo (disponible, pero sin encontrar un trabajo). En 2023 (1) hubo en Asturias 222.100 mujeres y 226.900 hombres en esta situación. Como ya se ha señalado anteriormente, estas cifras suponen 11.300 mujeres activas más que en 2022 y 1.600 hombres menos.
La tasa de actividad expresa el número de personas ocupadas o desempleadas por cada 100 personas de 16 y más años. En 2023 la tasa de actividad de las mujeres en Asturias fue 47,67%, y la de los varones, 54 %. Respecto al año anterior, la tasa de actividad de las mujeres aumentó en más de 2 puntos y la de los hombres se redujo en 0,7 puntos.
A lo largo del periodo que resume la tabla 3.3., las tasas de actividad de las mujeres asturianas habían tenido una evolución paralela a la de las tasas de las españolas; en los 2 años inmediatamente posteriores a la pandemia, sin embargo, las tasas de las españolas crecieron, al contrario de las de las asturianas. En 2023, la buena evolución de la tasa de actividad de las asturianas ha permitido recortar la distancia que las separa de la media de actividad de las mujeres en España
Como consecuencia del diferente comportamiento de las tasas de actividad de cada sexo, la brecha en estas tasas (tasa de actividad de los hombres - tasa de actividad de las mujeres) se fue reduciendo progresivamente, tanto en Asturias como en el conjunto nacional, hasta 2020 (Gráfico 3.9). La crisis de cuidados generada por la pandemia provocó un nuevo ensanchamiento de la brecha en las tasas de actividad de mujeres y hombres en 2021 y 2022. En 2023, por el contrario, se ha producido una entrada fuerte de mujeres al mercado laboral asturiano, que ha provocado la mayor caída en la brecha de las tasas de actividad de la serie: -3 puntos porcentuales en un año. En la actualidad, se sitúa en 6,3 puntos
Durante la los años en que la crisis económica afectó más al mercado laboral, entre 2012 y 2015, la brecha asturiana de las tasas de actividad también se redujo considerablemente, aunque en aquel momento se debió más a la caída de la actividad de los hombres que al aumento de la actividad de las mujeres.
Aun con el aumento experimentado en el último año, la tasa de actividad de las mujeres asturianas sigue siendo la más baja de todas las Comunidades Autónomas (Gráfico 3.11). Se da la circunstancia de que también la brecha de género asturiana en las tasas de actividad es la menor de las brechas españolas.
Por edades, el grupo de 20 a 24 años es el que concentra mayores diferencias de género en nuestra región en cuanto a la actividad laboral. Por un lado, aunque en todos los grupos las tasas de actividad de las asturianas son menores que las respectivas tasas de las españolas, la mayor diferencia se da en dicho grupo de edad (Gráfico 3.13.), en el que las asturianas están prácticamente 13 puntos por debajo de la tasa media nacional para ese grupo de edad. Si la comparación de las tasas de las mujeres asturianas se hace en relación con las de los hombres de la región, la diferencia en Asturias es máxima en el mismo grupo de edad: la tasa de los hombres supera en 9,44 puntos a la de mujeres en nuestra región.
Hay que señalar también el comportamiento del grupo de jóvenes de 16 a 19 años: en Asturias la tasa de actividad de las mujeres en estas edades supera a la de los hombres, estando la tasa de ellos por debajo del promedio nacional para su sexo.
En relación con 2022, la tasa de actividad de los hombres asturianos aumentó entre los más jóvenes (de 16 a 24 años); en las edades centrales (25 a 44), disminuyó casi un punto, y entre los mayores de 54 prácticamente no varió.
En el caso de las mujeres, las variaciones han sido más pronunciadas. Precisamente el grupo de 20 a 24 es en el que se redujo la actividad entre las asturianas (casi 5 puntos menos); en el resto de grupos de edad, la tasa de actividad creció de manera importante: 3,9 puntos entre los 25 y los 54 años.