Título - Salarios e ingresos
Salarios e ingresos - Última actualización: 9 de junio de 2025
Salario bruto medio por hora y Brecha Salarial de Género en salario por hora.
Salario bruto medio por hora y Brecha Salarial de Género en salario por hora.
En el análisis de la brecha entre mujeres y hombres se toma como primera medida el salario bruto por hora, con el fin de eliminar el efecto que sobre los salarios mensuales o anuales tiene el desigual reparto del trabajo a tiempo parcial o temporal, por ejemplo, o el mayor uso de las reducciones de jornada o de las excedencias por cuidado de menores por parte de las mujeres. A partir del salario/hora se construye la Brecha Salarial de Género en salario por hora (o Brecha salarial no ajustada), que es el indicador armonizado en toda Europa para medir la brecha salarial; “ la brecha de género no ajustada a las características individuales que pueden explicar parte de las diferencias salariales entre hombres y mujeres, es la diferencia entre el salario bruto por hora de los hombres y el de las mujeres, expresado como porcentaje del salario bruto por hora de los hombres” (2)
La especificación “no ajustada”, se refiere a que el valor que arroja este indicador tiene en cuenta las características individuales de mujeres y hombres; es decir, si cada sexo reúne a individuos de características que -de manera agregada- son diferentes, estas características individuales podrían estar también en la raíz de las diferencias de salario, sin poderse determinar la influencia que tiene el pertenecer a uno u otro sexo. La edad, la experiencia profesional o la formación, son algunas de estas características. Por tanto, cuando se da el valor de BSG no ajustada, se quiere decir que no está ajustada a las características personales de los individuos en base a los que se estima la brecha. La brecha no ajustada también se denomina brecha observada, porque es el resultado final observado.
También pueden darse medidas de BSG en salario por hora ajustada a las características personales; esto se hace calculando la brecha entre mujeres y hombres que comparten las mismas características: mismo grupo de edad, mismo nivel educativo, experiencia laboral etc.
Existen diversas metodologías estadísticas que permiten descomponer la brecha “observada” o no ajustada, en una brecha “explicada” (la parte que se debe a las diferencias entre sexos de ciertas características observables), y otra parte “no explicada” o brecha ajustada, que sería el resto (y que recogería tanto elementos de discriminación como otros elementos que, sin ser de tipo discriminatorio, presentan dificultades para ser observadas y medidas) (3).